Génesis 37:5-11
Cierto día José tuvo un sueño y cuando se lo contó a sus hermanos, estos le tuvieron más odio todavía, 6 pues dijo: Préstenme atención que les voy a contar lo que he soñado. 7 Resulta que estábamos todos nosotros en el campo atando gavillas. De pronto, mi gavilla se levantó y quedó erguida, mientras que las de ustedes se juntaron alrededor de la mía y se inclinaron ante ella. 8 Sus hermanos replicaron: ¿De veras crees que vas a reinar sobre nosotros y que nos vas a gobernar? Y lo odiaron aún más por los sueños que él contaba.
Después José tuvo otro sueño y se lo contó a sus hermanos. Les dijo:
Tuve otro sueño en el que veía que el sol, la luna y once estrellas se inclinaban ante mí.
10 Cuando se lo contó a su padre y a sus hermanos, su padre lo reprendió:
¿Qué quieres decirnos con este sueño que has tenido? —le preguntó—. ¿Acaso tu madre, tus hermanos y yo vendremos a postrarnos en tierra ante ti? 11 Sus hermanos le tenían envidia, pero su padre meditaba en todo esto.
Génesis 37:19
“Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador”
José era un soñador en grande, sus sueños eran que él siendo uno de los menores entre sus hermanos, llegaría a ser mayor que todos ellos. Incluso, los sueños de José rompían lo límites, él soñaba que aún sus Padres se inclinaban ante él.
La primera clave para triunfar es soñar en grande. ¡Tienes que soñar en grande! No dejes que nadie te prive de soñar en grande, ni el sistema, ni el colegio, ni tu entorno. José vivió situaciones extremas, pero nunca dejó de soñar en grande, y terminó siendo el hombre más rico y poderoso de su tiempo.
¿Quién era José genealógicamente?
José era uno de los doce hijos de Jacob, hijo de Isaac, Hijo a Abraham, es decir, José era hijo de la promesa de Dios hecha en Abraham.
Pacto de Dios con Abraham
Génesis 17:1-21
17 Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció Jehová y le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé perfecto. 2 Y pondré mi pacto entre mí y ti, y te multiplicaré en gran manera. 3 Entonces Abram se postró sobre su rostro, y Dios habló con él, diciendo: 4 He aquí mi pacto es contigo, y serás padre de muchedumbre de gentes. 5 Y no se llamará más tu nombre Abram, sino que será tu nombre Abraham, porque te he puesto por padre de muchedumbre de gentes. 6 Y te multiplicaré en gran manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti. 7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.
Génesis 12:1-3
Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3 Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.
¿Quiénes somos nosotros?
Gálatas 3:29 dice que, en Cristo Jesús, somos descendientes de Abraham y herederos de la promesa “Y si sois de Cristo, entonces sois descendencia de Abraham, herederos según la promesa”
Gálatas 4:27-28
Porque escrito está: regocíjate, oh estéril, la que no concibes; prorrumpe y clama, tú que no tienes dolores de parto, porque más son los hijos de la desolada, que de la que tiene marido, y vosotros, hermanos, como Isaac, sois hijos de la promesa.
En conclusión: Al igual que José el patriarca, tenemos sobre nuestra vida la misma promesa hecha en Abraham, por medio de Cristo. ¡Wow!
¿Entonces, qué es lo que nos separa de José?
La respuesta es “Soñar en grande”
Ejercicios de Transformación
“Soñar en grande”
Objetivos de los ejercicios:
- Traer a la atención lo aprendido por medio de la participación.
- Identificar las limitantes personales por medio de preguntas poderosas
- La visualización por medio de ejercicios.
- Entregar herramientas para la aplicación y transformación
Ejercicio I:
Escribe tus 3 más grandes sueños en una frase cada uno. (3 minutos)
Ejercicio II:
Lee los sueños que has escrito y pregúntate ¿Son realmente grandiosos y extravagantes mis sueños?
Retroalimentación:
Si te has dado cuenta que tus sueños en realidad no son tan grandiosos, ni extravagantes, significa que hay algún pensamiento o creencia que está bloqueando tus verdaderos sueños.
¡Todos tenemos sueños extraordinarios en nuestros interior! Fuimos creados a imagen y semejanza de Dios!
Preguntas y retroalimentación:
- ¿Cuánto tiempo te tomó escribir tus 3 sueños?
Retroalimentación:
Si no has logrado escribir con rapidez y seguridad tus sueños, significa, que tus sueños tienen muchas cosas encima que no te permiten encontrarlos cuando los vas a buscar.
Esas cosas que ocultan nuestros sueños, muchas veces son las cosas triviales que dejamos que nos atrapen, así como los que haceres de la casa, las deudas, las responsabilidad que tomamos y que no corresponden a nuestro destino.
- ¿Cuáles fueron las limitaciones mentales que surgieron al escribir tus sueños?
Retroalimentación:
¿Miedos?
¿Imposibilidad?
¿Incapacidad?
Otros.
Herramientas para la aplicación y transformación
¿Cómo sacar tus sueños grandiosos?
Solución:
Toma tiempos a sola, para sacar esos sueños grandiosos que están en lo profundo de tu interior y traerlos al frente.
¿Cómo eliminar las limitaciones mentales?
El crecimiento se da cuando sobrepasamos nuestros límites y superamos lo que creíamos posible dentro del marco de nuestras habilidades y experiencias. El reto es que muchos empresarios no saben cómo identificar sus límites para llegar al siguiente nivel. De los cientos de emprendedores que he entrenado, los más exitosos han desarrollado estas seis habilidades.
- Supera la mentalidad limitante
Ser capaz de sobrepasar tus límites tiene mucho que ver con la mentalidad que adoptes. Es común que evitemos esforzarnos por cosas que creemos imposibles. Cuando tú crees que no puedes lograr algo, limitas tu capacidad de esforzarse al máximo. Es esta mentalidad limitante la que te podría estar frenando. Hasta 1954 los atletas creían que correr una milla en menos cuatro minutos era imposible, hasta que Roger Bannister lo logró e impuso un récord. Desde entonces, casi 2,000 atletas han superado esta marca.
En muchos casos, las creencias limitantes son pensamientos impuestos en tu cabeza por la gente que te rodea. Es común que los empresarios se desanimen al recibir comentarios negativos de aquellos que no entienden su visión.
Para superar las creencias y pensamientos limitantes, pregúntate, ¿por qué esto no es posible? O ¿quién dijo que no podías lograrlo? Si no encuentras una razón legítima que te impida alcanzar tu objetivo, es muy probable que debas cambiar tu mentalidad.
- Establece metas ambiciosas
La mayoría de los expertos en establecimiento de objetivos recomiendan utilizar metodologías como el método SMART. Estos enfoques son excelentes para establecer objetivos comunes, pero si buscas superar tus límites, necesitas pensar fuera de la caja. Establecer metas agresivas puede impactar en tus acciones. Por ejemplo, si lo que quieres es vender tu producto a diez clientes este mes, puedes decidir hacer llamadas para contactar a tus clientes potenciales. Pero si tu objetivo es cerrar ventas con 1,000 clientes, sería prácticamente imposible hacer ese número de llamadas. Esto te obliga a repensar tu estrategia.
El objetivo no es plantearse metas inalcanzables, sino que ayudarte a identificar si las metas más pequeñas limitan tu progreso.
- Descubre qué te motiva
La motivación juega un papel muy importante en la capacidad que tenemos para superar límites. Los profesionistas altamente motivados tienen mayores niveles de satisfacción, mejor rendimiento y más probabilidades de tener éxito. Visualizar cómo se ve y cómo se siente el éxito te ayudará a encontrar la motivación para seguir esforzándote.
Los recordatorios visuales como fotos o imágenes que te ayuden a recordar tus motivaciones como la familia, el auto deportivo de tus sueños o convertirte en el principal proveedor del mercado pueden ser muy útiles. Los mantras que repites a diario también pueden ser una excelente manera de mantenerte motivado.
- Siéntete cómodo con estar incómodo
Identificar tus límites es la clave para saber cuáles puedes superar. Jugar al límite te producirá un sentimiento de incomodidad, ¡está bien! Si no sales de tu zona de confort, nunca crecerás. Desafíate a ti mismo a hacer cosas nuevas, aunque te resulten incómodas. Con el tiempo, comenzarás a sentirte a gusto con tus nuevos límites.
Repetir este proceso una y otra vez te ayudará a seguir creciendo. Recuerda que todo experto alguna una vez fue un principiante.
- Acepta el fracaso, como un aprendizaje
Cuando le preguntaron a Thomas Edison sobre los resultados sobre su trabajo en la bombilla moderna, declaró: “No he fallado. He descubierto 10,000 opciones que no funcionan”. Al llegar al límite de tus habilidades y experiencia, te ves obligado a enfrentar el fracaso, la forma en la que le haces frente incide en tu capacidad para seguir creciendo. Fallar te da la oportunidad de aprender lecciones valiosas que puedes capitalizar. El fracaso es una parte natural del crecimiento, así es que úsalo a tu favor.
- Rendir cuentas
Algunas personas tienen el hábito de esforzarse para llegar más alto, otros necesitan ayuda de quienes los rodean. Si necesitas apoyo busca a alguien que pueda impulsarte, retarte a hacer más o atreverte a tomar riesgos. Un buen aliado puede ser un mentor, un coach u otra persona que pueda hacerte comentarios sinceros y guiarte. Mejor aún: integra un consejo de asesores.